¿Por qué el tratamiento con opioides fracasa en el dolor lumbar?
En el artículo anterior he hablado de los opioides y de sus riesgos y beneficios en el tratamiento del dolor lumbar crónico,
Actualmente estoy viendo con preocupación la crisis sanitaria que hay con este tipo de medicación, por falta de información, lo que ha generado un problema considerable en el área de la medicina.
Motivado por esta situación consideré realizar una encuesta, para la cual conté con la colaboración de un grupo de 45 médicos expertos de la unidad del dolor de toda España, En esta encuesta se analizaron las posibles causas de que el tratamiento con opioides no esté ofreciendo resultados positivos a largo plazo en el dolor lumbar crónico, como muestran los estudios.
Estos son los resultados de la encuesta:
De la encuesta realizada se obtuvo una información que considero es importante dar a conocer, ya que una razón de la problemática actual con este fármaco es la falta de información que existe, sobre todo en el tratamiento con opioides del dolor lumbar crónico. Entre los datos obtenidos destacan las siguientes razones:
Los aspectos psicosociales
Un 84.4% consideran que esta es una de las razones principales por los que los opioides no funcionen para el dolor lumbar.
En los casos que presenten algún cuadro depresivo o algún proceso psicológico resaltante, como el hecho de que el dolor que padece le ha afectado en su rutina y su desempeño social o laboral, en estos casos, el resultado del tratamiento con opioides puede no van a ser nada favorable.
Estos fármacos producen sedación y el paciente puede que no sienta dolor en el momento pero a la vez estará aletargado mientras que el problema principal de dolor no será controlado, por lo que no mejorará el estado anímico ni social del sujeto.
Además el riesgo de adicción si esta mediación no se usa de forma correcta puede agrabar el cuadro depresivo y el riesgo de suicidio. El suicidio por subre-ingesta de medicación es la principal causa de muerte secundaria a opioides.
La tolerancia a largo plazo
Según los expertos encuestados otro motivo relevante para no usar los opioides como tratamiento con opioides del dolor lumbar, es la tolerancia a largo plazo que este medicamento produce con el tiempo
Esta tolerancia lleva a que el paciente cada vez necesite una dosis mayor para igualar el efecto. Este problema se puede minimizar si las dosis desde un principio son bajas, y debidamente controladas.
Falta de información médica y prejuicios en los tratamientos con opioides
La encuesta también arrojó como dato importante que los pacientes en muchas ocasiones incumplen el tratamiento con opioides por falta de información de su médico o por tener prejuicios sobre el fármaco.
Esto constituye una barrera y muchas personas se nieguen a tomar este tipo de medicamentos, por esos prejuicios que existe en la población con respecto a este fármaco en cuanto a los efectos que ocasiona, como la tolerancia y por supuesto el posible riesgo de adicción.
Efectos secundarios a largo plazo
Otra razón para limitar el uso de opioides según los expertos, es que los mismos pueden producir numerosos efectos secundarios a largo plazo, sobre todo en las personas mayores, como por ejemplo estreñimiento, sequedad de la boca, sedación, incluso hay personas que presentan nauseas desde el principio del tratamiento, lo que no les permite continuar.
Los opioides no controlan el dolor lumbar por sus características
Según los resultados de la encuesta, un porcentaje destacó que los opioides no controlan el dolor lumbar debido a sus características,
Hay diferentes tipos de dolor. El más comun es el dolor somático, como en una torcedura de tobillo o una fractura. Es un dolor mecanico (empeora con el movimiento) y localizado que desaparece cuando la estructura lesionada se recupera. Los opioides logran controlar bien este tipo de dolor.
En cambio en el dolor lumbar hay estructuras nerviosas que al ser afectadas por largo tiempo producen un tipo de dolor neuropático con memoria (sensibilización central). Este tipo de dolor no responde bien a los opioides.
Otras causas por los que los opioides no ayudan
También es importante señalar el hecho de que los pacientes con dolor lumbar requieren mantenerse activos y romper con el reposo para lograr mejorar las dolencias, prevenir el sedentarismo y tener un estilo de vida saludable.
El uso de los opioides no ayuda con esto, pues producen un efecto considerable de sedación que en ocasiones dificulta que el paciente retome su vida activa.
Conclusiones
En Estados Unidos, la actual crisis de los opioides ha puesto en jaque a la sanidad del pais. Estos medicamentos usados indiscriminadamente, sin supervisión médica pone el riesgo la vida del paciente.
Considero que es prioritario que los especialistas que receten este fármaco deben tener el conocimiento adecuado acerca del medicamento, para orientar al paciente sobre las limitaciones y pautas que debe seguir.
El opioide le causará efecto a corto plazo, calmando parte del dolor momentáneamente, pero mi experiencia y los resultados de los estudios muestran que a largo plazo su efecto es muy limitado.
Los tratamientos con opioides deben ser para casos muy puntuales, teniendo claro la eficacia para según que dolencias, y por supuesto sin abusar de sus prescripción. una vez agotadas las medidas intervencionistas específicas para cada caso. Esto quiere decir, que siempre es más recomendable un tratamiento dirigido específicamente al origen del problema que tomar una mediación de forma oral.
Con las técnicas anestesicas de la unidad del dolor podemos controlar el dolor en la mayoría de casos sin necesidad de prescribir esta mediación.
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